Seguir algunas pautas simples puede ayudarte a mantener el rendimiento que esperas de tus equipos en los próximos años. A continuación, te presentamos algunas recomendaciones para que rentabilices lo más posible tu inversión. 

1. Considera cómo estás utilizando tus equipos
El primer factor a tener presente es verificar para qué tipo de trabajos los estás destinando. El uso de una máquina no adecuada para el tipo de trabajo a realizar, resultará en una operación menos eficiente y podría también causar un mayor desgaste del equipo. 

2.  Equipa tu máquina para las condiciones del terreno donde operará
Esta es otra forma de proteger tu inversión. Por ejemplo, hay protectores disponibles para resguardar tanto los trenes de rodaje como los ejes de las excavadoras de las duras condiciones de trabajo, tenlo en cuenta.

3. Sigue los programas de mantenimiento
Los manuales de tus máquinas deben incluir un programa de mantención. Seguir las indicaciones de este documento es una de las formas más efectivas de obtener el rendimiento que esperas de tus máquinas a medida que envejecen. Si no tienes este manual, pídele a tu distribuidor una copia indicando el número de serie de tu equipo.

4. Compra repuestos originales
Las piezas de los fabricantes de equipos originales están diseñadas con tolerancias muy estrictas, a diferencia de los alternativos. Los ingenieros diseñan filtros para eliminar el nivel correcto de contaminantes según el equipo que se esté operando.  

5. Ajusta el mantenimiento para condiciones adversas
El funcionamiento en condiciones más exigentes, con mucho polvo o en climas extremadamente cálidos o fríos, puede implicar que tu equipo requiera cambios más frecuentes de fluidos, filtros o el uso de formulaciones de fluidos especiales.